martes, 18 de junio de 2013

el peronismo como mito



 A esto se refería el unidimensional pablo.


Lei para la facu un capitulo de "Especificando la política" de Norbert Lerchner y me gustó, después me acordé de la nota de sirvén que me hizo re calentar y nunca terminé de escribir la publicación que le iba a dedicar, el trabajo práctico justo tiene que ver con eso. los link van delineando la idea...

En el fragmento de texto analizado se puede ver la contraposición de 2 paradigmas para entender lo político, uno hegemónico y uno contra hegemónico.

La acción instrumental instaurada por el capitalismo imperante, lógica naturalista, que estudia a la sociedad como un hecho aislado, con métodos de las ciencias naturales, reduce el hecho social a relaciones de costo-beneficio, lo cual se traslada inexorablemente a otros ámbitos como el económico y el político ( que según esta lógica están separados ).

Esta lógica individual-metodológica  “objetiva”, formaliza racionalmente los hechos sociales de tal modo que se aplican recetas universales, sin tener en cuenta los contextos ni las particularidades de cada caso.

En el plano económico se puede ver este paradigma claramente en las teorías económicas de libre mercado y en el plano electoral, en las teorías de la elección racional de la escuela conductista.

En cambio, el otro paradigma en pugna es aquel que se sirve de la expresión simbólica de la política. No elimina la violencia (inerradicable), sino que incorpora figuras que encauzan este conflicto en forma de rituales o mitos.

La política como ritual es afirmación de la vida colectiva(a causa de ello, los sujetos unidimensionales no entienden que puedan existir este tipo de relaciones sin mediar el costo-beneficio), se ve claramente en los actos masivos, en los cuales se actualiza el sentimiento de colectividad, invocando el pertenecer a un orden, en la cual la misma colectividad se festeja a si misma. Es un forma de transformar el poder en orden. La confianza hacia el líder es solo una manifestación de la confianza hacia si mismos y hacia quien los representa como pueblo. Ello implica que  NO pueden ser sustituídos por mecanismos impersonales del mercado. Una vez que se constituyó el “nosotros”, una huelga, una misa, o cualquier acto se transforman en actos políticos (todo es potencialmente político).

El ritual político  confirma y actualiza un orden colectivo representado simbólicamente en un mito y da sentido a la vida social; a través del mito el individuo se inserta en un orden. El mito es una forma simbólica de disposición sobre el mundo.

Como conclusión, es notable que el fondo de la cuestión de estos  2 paradigmas tan opuestos es  la forma en que el individuo de una u otra parte interpreta a la sociedad, mientras uno lo hace unidimensionalmente(individualmente), el otro lo hace colectivamente, dejando su subjetividad de lado por un bien común.